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Kensington con sus cuadros tartán en los clásicos verde y marino, pero con un nuevo toque con una fina línea en lima (color que también está en su forro interior). Es una cartera con buena capacidad y con una ligera forma de caracola en su exterior, con pequeñas pinzas en su frontal. Coqueta y con el encanto tradicional de los cuadros tartanes, es una pieza bonita que levantará cualquiera de tus outfits de otoño. Cierra en cremallera y tiene bolsillo interior para que guardes las llaves o lo que necesites llevar más a mano.
Hecho en Madrid en nuestros talleres